Me esperaba más de esta película del año 2017 basada en la novel homónima de Alberto Sánchez Piñol al parecer excelentemente adaptado por Xavier Gens. No he leído el libro y no puedo corroborar este extremo. La idea era de las que me gustan, un faro en una isla que ha perdido su objetivo principal puesto que hace meses que no transita barco alguno cerca. Hay un joven meteorólogo ansioso de una libertad que la sociedad moderna no le brinda, un farero misterioso con un pasado oscuro que no revela nada del destino del anterior farero y todo esto en el año 1914, a punto de estallar la primera guerra mundial cuando ésta aún "solo" era la Gran Guerra sin numerales detrás. Las interpretaciones para valorar se quedan en tres actores: Ray Stevenson cumple como el farero Gruner y poco más. No es mal actor, pero aparte de cuatro miraditas al horizonte y salir con unas barbas de aquí a Lima no hace mucho más. David Oakes como el joven Friend tampoco supera el aprobado justo. El ...